Recetas Naturales para el Tratamiento de la Cuperosis y la Rosácea

La rosácea o acné rosáceo es una enfermedad crónica común que afecta principalmente a mujeres de edades comprendidas entre los 30 y los 50 años.


Principalmente se localiza en la frente, nariz, mejillas y barbilla. La rosácea es un ataque de los pequeños vasos sanguíneos. Los síntomas se van asentando progresivamente y la rosácea puede evolucionar en 3 fases:


● Durante la primera fase aparece un enrojecimiento de la cara. Inicialmente puntual y favorecido por ciertos factores, se vuelve permanente y muy a menudo asociado con la cuperosis: esta primera forma llamada vascular es la más común.


● En una segunda fase aparecen pápulas (granos sin pus) y pústulas (con pus), además de los signos vasculares. Estas lesiones aparecen sin ningún factor desencadenante particular.


● En una tercera fase aparece la denominada forma hipertrófica: es la más reciente y la más rara (menos del 5% de los pacientes, con un predominio masculino muy elevado). Se manifiesta por un engrosamiento de la piel del rostro, en particular la nariz: adquiere un aspecto rojo e hinchado, con una dilatación de los poros. Esta forma, más que las otras, tiene repercusiones psicológicas significativas por razones estéticas.


La rosácea no debe confundirse con la cuperosis. Esta última corresponde a una dilatación permanente y visible de los pequeños vasos de la piel del rostro. Se manifiesta por finas líneas rojas o violáceas justo debajo de la superficie de la piel, situadas simétricamente en la nariz y los pómulos.


Causas de la Rosácea


Todavía se desconocen las causas exactas de la rosácea, pero se mencionan algunas pistas, como las características genéticas (más comunes en piel clara, delgada y frágil).


También se sabe que algunos factores promueven la rosácea al causar sofocos y enrojecimiento, como la exposición al sol, el viento y las temperaturas extremas, los cambios térmicos repentinos (de calor a frío en particular) y el ejercicio físico. Emociones intensas y fuertes, consumo de alcohol, comida picante o bebidas calientes, podrían ser algunos de los factores que favorecen este trastorno de la piel.


Consejos


Para la limpieza del rostro, evita el agua y en su lugar utiliza aceites vegetales (jojoba, albaricoque, macerado de caléndula) que deberán enjuagarse con hidrolatos (lavanda, rosa damascena, manzanilla).


Para calmar la rosácea, usa el aceite esencial de Siempreviva (Helichrysum italicum), aceite vegetal de cártamo y polvo de avena coloidal.


Recetas


1. TRATAMIENTO DE LA CUPEROSIS (Vía Cutánea)


● Aceite esencial de ciprés: 2 gotas
● Aceite esencial de siempreviva: 1 gota
● Aceite esencial de Jara (Cistus ladaniferous): 2 gotas
● Aceite esencial de geranio rosa (Pelargonium asperum): 4 gotas
● Aceite vegetal de Calófilo: 4 gotas


Empleo: 3 gotas de la mezcla en aplicación local mañana y tarde hasta una mejoría sensible.


2. PIELES CON CUPEROSIS Y CAPILARES SANGUÍNEOS APARENTES (Vía Cutánea)


● 1/3 de hidrolato de Cistus ladaniferus (Jara)
● 1/3 de hidrolato de ciprés
● 1/3 de hidrolato de geranio rosa


Preparación: mezcla los tres hidrolatos y envasa en un frasco de spray.


3- ACNÉ ROSÁCEO (Vía Cutánea)


Conservar en un frasco de vidrio tintado azul o ámbar de 30 ml.


● Aceite esencial de Pistacia lentiscus: 10 gotas
● Aceite esencial de Cupressus sempervirens: 10 gotas
● Aceite esencial de Helichrysum italicum: 10 gotas
● Aceite esencial de Matricaria recutita: 20 gotas
● Aceite esencial de Copaifera officinalis: 10 gotas
● Aceite vegetal de calófilo: 10 ml
● Macerado oleoso de caléndula: 5 ml
● Aceite vegetal de cártamo: 23 ml


Empleo: Aplicar en el rostro en masajes suaves pero profundos (para promover la circulación), por la mañana y por la noche, todos los días, hasta una mejoría satisfactoria.


4- CUPEROSIS, ERITROSIS (Vía Cutánea)


● Aceite esencial de Cistus ladaniferus: 1 ml
● Aceite esencial de Pelargonium asperum: 2 ml
● Aceite esencial de Helichrysum italicum: 1 ml
● Aceite esencial de Daucus carota: 1 ml
● Vitamina E: 0,5 ml
● Aceite vegetal de Calophyllum inophylum: 10 ml
● Complemento: aceite vegetal de Triticum vulgare: 100 ml


Empleo: 1 a 2 aplicaciones locales al día.